Hablamos con Lander Aretxabaleta de Bodega Magalarte Zamudio.
- Sexta generación de txakolineros, ¿cuál es la historia de vuestra bodega?
Somos una bodega familiar, procedente del caserío Magalarte en las laderas occidentales de Zamudio y con tradición vitivinícola desde mediados del siglo XIX, heredada de padres a hijos durante al menos 6 generaciones.
Hoy en día, en nuestras nuevas instalaciones situadas junto al Parque Tecnológico de Zamudio, se aúnan tradición y tecnología punta.
La Bodega Magalarte Zamudio se acoge a la denominación de origen Bizkaiko Txakolina desde 1994, además todos nuestros viñedos están acogidos a sistemas de producción integrada partiendo siempre del principio de que el txakoli se hace en la viña y con la filosofía del respeto al medio ambiente, al viñedo y al entorno.
- ¿Cuándo y cómo decidiste que querías trabajar en la bodega familiar?
Desde que nací, me vi rodeado de viñas y entre copas. Tenía claro que seguir con la tradición iba a ser una de mis motivaciones y además es el respeto al trabajo y al esfuerzo de muchas generaciones anteriores.
- ¿Qué os diferencia del resto de bodegas de txakoli?
Tenemos grandes bodegas en Bizkaiko Txakolina y cada una de ellas tiene su historia. La nuestra nos diferencia por ser una familia que cuenta con 6 generaciones, y este motivo hace que hayamos iniciado nuestra andadura incluso antes de la fundación de la denominación de origen.
- ¿Es complicado combinar tradición y vanguardia?
Sinceramente creo que es el reto y combinación perfecta. Disponemos de equipos y sistemas de elaboración de txakoli con métodos vanguardistas y nuevas técnicas enológicas, respetando siempre la tradición artesanal. Por eso los txakolis son el fruto del trabajo, tradición y una constante innovación.
- Hay un relevo generacional en la dirección de las bodegas en general, pero también en el consumidor, ¿cómo se acerca el txakoli a las nuevas generaciones?
Vivimos en un lugar idóneo para entender nuestra cultura y nuestras tradiciones. El txakoli cuenta con ambas y eso pone en valor para que las nuevas generaciones se acerquen al txakoli. Tenemos la gran fortaleza de que cada txakoli cuenta con una historia que hace que sea única y creo que las nuevas generaciones saben apreciar ese sentido de pertenencia.
- ¿Cual sería el mejor maridaje para vuestro txakoli?
Actualmente, el txakoli se ha convertido perfecto para maridarlo con lo que a uno más le guste. Entiendo que a veces somos muy de maridajes, pero les diría que el mejor maridaje es entre lo que te guste y lo que te apetezca.
- Estáis dentro del programa de acompañamiento a productores de EROSKI, ¿Cómo os ayuda esto? ¿Cuáles son vuestros objetivos?
Es un programa que nos ayuda a identificar el estado del sector y las recomendaciones de mejora para seguir avanzando. Es un programa que versa sobre la sostenibilidad, en su plano más amplio de la palabra, tocando la calidad técnica y nutricional, la calidad medioambiental, así como la social y económica. Hay cada vez una mayor inquietud en aspectos medioambientales y eso es responsabilidad de todos y todas.
- ¿Cuales son vuestros próximos pasos? ¿y vuestro sueño?
No nos vamos a conformar con seis generaciones y por lo tanto nuestro sueño es que haya una próxima generación que siga con el relevo de una historia centenaria. Como dice mi padre, ser productor de vino no es una profesión, es un estilo de vida que disfrutamos en familia.
Hablamos con Patxi Casals, Director General de Aguas Alzola
- ¿Cuál es la filosofía de Alzola?
En general la filosofía que mantenemos desde el Manantial de Alzola es la de hacer “Cultura del Agua”, de tal manera que se pueda empezar a comprender la problemática de la escasez de agua y sus problemas derivados, tanto en el plano medioambiental (escasez de recursos, contaminación, medio ambiente…) y desde el plano social. Debemos de trasmitir que la inmensa mayoría de la población que vive entre los dos trópicos, está en continua amenaza y desprotección por la escasez de agua en su entorno, lo que provoca el 80% de sus enfermedades, la continua migración y la pobreza civil extrema. Somos defensores de que, si no se pone el foco en estos lugares y se soluciona el problema del agua de ingesta, además de la desaparición de esa enorme población –mayoritaria en el mundo- nos veremos abocados a una tercera guerra mundial derivada de la falta de agua, aunque actualmente el foco se sitúe en los derivados del petróleo, de fondo el problema real es la escasez de agua y la constante contaminación de los acuíferos.
- ¿Qué momento está viviendo la marca?
Ahora mismo, estamos en un momento de recuperación, después de la pandemia de Covid-19. Sabemos que tenemos una marca reconocida en nuestro entorno por las acciones sociales que de forma continua llevamos a cabo, pero todavía nos queda camino por recorrer para estar en una buena posición que nos permita iniciar crecimiento sostenido.
- El agua vasca es Alzola, ¿ese es vuestro diferencial?
El agua vasca es toda la que nos rodea en nuestro entorno, ahora bien, el agua de mayor calidad vasca es Alzola. De forma objetiva hemos trasmitido esta información, y la información real de nuestro pequeño manantial y sus cualidades químicas que nos hace tan especiales. De forma general, quien nos prueba repite.
- ¿Qué le decimos a quién afirma que todas las aguas son iguales?
Pues es algo muy normal, porque en general, somos privilegiados por tener agua potable en nuestras casas, y no se ha hecho diferenciación ni cultura sobre las aguas.
Las aguas son todas diferentes, somos 70% agua, y por tanto nuestra mayor herencia genética viene del agua que bebieron nuestros progenitores, al igual que la herencia que dejemos, procederá en su mayoría del agua que bebamos.
Nada tiene que ver un agua potable, dónde los niveles de tóxicos permitidos vienen aprobados por una ley general de aguas de consumo humano, y que son tratadas de forma controlada por agentes químicos, que en el largo plazo también tienen contraindicaciones, con una agua que está calificada con pureza original en su nacimiento (lo que quiere decir que no ha tenido contacto con el hombre) y que es saludable y con propiedades para el riñón y el aparato digestivo, que no podemos encontrar en otros productos.
- ¿Se puede innovar en el mundo del agua?
En todo entorno se puede y se debe de innovar. Innovar es conocimiento aplicado en el cliente, entendiendo la palabra cliente en toda su extensión, tanto interno como externo, y por supuesto pensado para los clientes que ya tienes, como pensando en aquellos que lo serán y todavía no lo son. El mundo del agua es muy particular, porque solo se tiene un producto que no se puede tocar ni modificar, solamente se puede custodiar, por lo que la innovación generalmente viene dada por la comunicación y por el “envoltorio”. En el mundo del agua queda mucho por innovar, en función proporcional a lo que el usuario poco a poco vaya tomando conciencia de su importancia.
- El cambio de eslogan a Basque Water ¿significó una estrategia de expansión a mercados internacionales?
Sí, por un lado, fue la integración del sentimiento local, pero con una estrategia mucho más global. En general desde fuera se busca agua en “inglés“ y por añadido el “basque” tiene grandes y buenas connotaciones mundiales en gastronomía.
- ¿Creéis que el producto local, el de cercanía, está viviendo un buen momento?
El producto local debe de ser reivindicado mayormente, todavía queda mucho recorrido para hacer entender que merece la pena comprar un producto local, que ofrezca la misma calidad y precio que uno no local. No solo por el efecto inmediato en la generación de riqueza cercana, sino porque genera una llamada de atención a terceros más lejanos, que confiarán más en un producto reconocido en su propio entorno, que no reconocido. Es un efecto “llamada”, aunque somos conscientes de que, como se suele decir, “ser profeta en tu tierra exige el doble de esfuerzo que serlo fuera”.
El producto local está recobrando fuerza y presencia, el trabajo que se está haciendo es bueno y ahora es el momento de redoblar esfuerzos, para que no peligre su existencia y se deslocalice mayormente.
- Sois parte del programa de acompañamiento a familias productoras de EROSKI, ¿qué os animo a participar en el programa?
Desde siempre hemos creído que EROSKI tiene un sentimiento real hacia lo local, por encima de campañas publicitarias y por encima del tratamiento habitual en otras cadenas de distribución, donde de forma sistemática se usa el vocablo “local” de forma “marketiniana” pero vacía, y en muchas ocasiones casi en forma de explotación del pequeño productor.
- ¿Qué objetivos esperáis conseguir?
Seguir y asentar la línea de reconocimiento de que, haciendo las cosas con sinceridad y humildad de forma sostenida, se alcanzan objetivos y más cuando se hace acompañado por tus semejantes, que es la manera de obtener constancia en el largo plazo.
- ¿Animaríais a otros productores a formar parte de él?
Sin duda, es fundamental ser parte del mismo, si los productores queremos reconocimiento de nuestro trabajo y visualización de nuestros productos y por qué no, de nuestras necesidades como colectivo y de forma singular.
Hablamos con Asun Eguren, Directora de la bodega Eguren Ugarte:
- ¿Cuál es la filosofía de Eguren Ugarte?
En Eguren Ugarte somos agricultores del vino desde 1.870. Somos una bodega familiar, hospitalaria y con vocación internacional.
Nuestra filosofía es cuidar el ecosistema a través de nuestros viñedos, cuidar nuestra sociedad a través de nuestro legado, compartir nuestros valores y llevar nuestra región a través de nuestros vinos a todos los lugares del mundo.
- ¿Qué momento está viviendo la marca?
Estamos viviendo un momento de alegría y satisfacción, porque vemos como toda la sociedad está tomando conciencia de la importancia del medio ambiente, que para nuestra empresa es el modus vivendi. Además, tenemos la suerte de disfrutar cada día y de poder compartirlo a través de nuestras visitas, a través de los clientes que se alojan en nuestra casa, de los eventos que hacemos y de toda la cadena de valor que vemos como ha vuelto a la vida tras la pandemia.
- Dos kilómetros de cuevas subterráneas dan para muchas historias… Cuéntanos alguna.
Son muchas las historias que encierra, unas relacionadas con el momento de construcción, en los años en que mi padre estando al frente, imaginaba y definía cada rincón. Otras relacionadas con visitantes.
Una de ellas es un día que una clienta extranjera nos visitaba y estaba tan encantada con el lugar, que se separó del grupo y desapareció. Y no es hasta el momento en que nos sentamos a comer cuando echamos en falta su presencia. Volvimos preocupados a las cuevas, donde nos la encontramos entusiasmada con el lugar tomándose un “selfi” tras otro.
- Vuestra bodega tiene un sello muy personal ¿en qué se diferencia del resto? ¿Y vuestro vino?
Nuestra bodega se diferencia en nuestro propósito: somos “Agricultores del Vino desde 1870” y por ello nuestra razón de ser es ser una bodega referente que transmite el amor y cuidado por nuestra comarca, por nuestra tierra, por nuestros viñedos y por la diversidad del ecosistema; que transmite un relato, unos valores de hospitalidad, de emprendimiento, de innovación, de tenacidad, de trabajo, de visión de futuro, y todo ello como excusa e hilo conductor: el vino de Rioja Alavesa.
Nuestro vino se diferencia del resto en la confianza y pasión que transmite. Cuando disfrutas de nuestros vinos estás dando valor a un legado que cuida la uva de cada parcela, así como de toda una comarca y, además, que vive la pasión por estar cerca del cliente, compartiendo y ofreciendo un vino para cada gusto y para cada momento.
- ¿Se puede seguir innovando en el mundo del vino?
Eguren Ugarte ha sido el único vino patrocinador del 2ª Congreso Internacional de Innovación organizado por APD en Barakaldo. Así que podemos decir que la innovación no es una cuestión de empresa, es una cuestión de personas, una actitud ante la vida; y es a través de una reflexión profunda, cuando nace la puesta en práctica de la innovación conociendo cuál es el valor qué aportamos al cliente y de qué forma podemos hacerlo más eficiente y de mayor calidad.
- El compromiso con el medioambiente ha sido una constante en vuestra historia, incluso en tiempos en los que no era tan popular ¿verdad?
Eguren Ugarte es una empresa familiar, que vive la responsabilidad sobre el legado recibido y que quiere transmitir a futuras generaciones.
Un legado en el que la visión a largo plazo, el compromiso con la sostenibilidad y el cuidado de los bienes y del respeto a los mismos, es lo más importante.
Como ejemplo, contaré el origen de la construcción de las cuevas. Buscábamos tener amplios espacios para poder compartir con clientes y amigos, y es el recuerdo de un momento de la infancia de mi padre, cuando nuestra familia pierde un edificio importante por no disponer del material para mantenerlo, lo que da pie a construir las cuevas, las cuales no tiene un tejado o paredes que mantener, además de disfrutar de una inercia térmica que hace que tampoco sea necesaria en ellas climatización alguna.
- ¿Creéis que el producto local, el de cercanía está viviendo un buen momento?
La pandemia ha sido una lección global que nos ha llevado a todos a un momento de profunda reflexión, a darnos cuenta de la esencialidad de los alimentos y de la importancia de los proveedores locales, y del producto local como valor intrínseco.
- ¿Qué os parece el programa de acompañamiento a familias productoras de EROSKI?
Nos parece una iniciativa muy valiosa. La ayuda que nos presta EROSKI mediante este programa es un avance y una puesta al día de nuestra empresa , porque EROSKI tiene los recursos necesarios para hacer de tractor en el análisis y conocimiento de lo que buscan los clientes y de este modo enriquecer la cadena de valor que formamos junto a ellos.
- ¿Qué objetivos esperáis conseguir?
Esperamos mediante este programa conocer y encajar los valores del cliente y recibir el asesoramiento por parte de EROSKI en dicho camino.
- ¿Animaríais a otros productores a formar parte de él?
Sí, los animaría a participar porque para nosotros es una innovación que nos atrae, que nos une a EROSKI y a la vez nos mejora como empresa.
Hablamos con Joana Tello, Directora Comercial de la cooperativa agrícola Barrenetxe
- ¿Cuál es la filosofía de Barrenetxe?
Producir hortalizas sostenibles, de calidad y con sabor de la huerta de siempre.
- ¿Qué momento está viviendo ahora la cooperativa?
En estos momentos hay una gran incertidumbre de cómo va a evolucionar el mercado: cambios en los hábitos de consumo, encarecimiento de materiales auxiliares y transporte, falta de suministros… En estos momentos todo se encuentra bastante desordenado y nos complica bastante nuestro día a día.
- ¿Hay relevo generacional en el mundo de la agricultura? ¿Qué debería cambiar para asegurarlo?
El relevo generacional ha sido y sigue siendo un gran reto para el sector. Aunque se hayan dado pequeños pasos para mejorar las condiciones laborales y productivas, los márgenes obtenidos son mínimos y conseguir un precio adecuado que pueda cubrir los costes de producción y recolecta, cada vez es bastante más difícil. Es necesario seguir apostando por las mejoras del sector y también tener al consumidor y a la administración pública cerca, para que ese cambio se haga efectivo y de esta manera, poder animar a la nueva generación a ver la agricultura como una forma de vida y trabajo.
- Ofrecéis compra online en forma de cesta semanal, ¿cómo está funcionando?
Poco a poco va mejorando, aunque al tratarse de producto fresco, cuesta animar al consumidor comprarlo por internet. En el momento de compra, aun preferimos ser nosotros mismos quienes elegimos la fruta y verdura. De todos modos, cada vez compramos más por internet, ya que el ahorro de tiempo que nos facilita esta herramienta, nos anima más a aventurarnos en este mercado digital.
- ¿Cuáles son las hortalizas de verano en Euskadi? ¿Como llenaríamos esa cesta o line de Barrenetxe?
El verano es el mejor momento para producir y consumir nuestras hortalizas, tenemos de todo: calabacines, cebolletas, pimientos, guindillas, tomates, pepino, judía verde, cebolletas….
- Las redes sociales están siendo un buen canal para relacionaros con los consumidores: guía de recetas propia, lovers… ¿Cómo valoráis la experiencia?
La experiencia es positiva y sabemos que estar en las redes es necesario. Las redes son una buena plataforma para conectarnos con nuestros clientes y la mejor manera para que puedan conocernos mejor, saber cómo trabajamos, quienes somos.
- ¿Creéis que el producto local, el de cercanía, está viviendo un buen momento?
La demanda del producto local lleva ya varios años en alza y tenemos la certeza de que seguirá creciendo. Cada vez somos más conscientes de la realidad en la que vivimos, de la importancia de tener un sector vivo y activo, priorizar la compra de productos respetuosos con el medio ambiente y, sobre todo, la importancia de nuestra salud. Como consumidor, cada vez somo más exigentes con la alimentación y está en nuestras manos ofrecerles hortalizas que cumplan con todas sus necesidades.
- ¿Qué os parece el programa de acompañamiento a familias productoras de EROSKI?
Todo lo que sea positivo para el sector, nos parece estupendo. Necesitamos tener un sector más profesional y mejor constituido y para eso, es necesario tener el apoyo y acompañamiento de nuestros consumidores, clientes y administración pública.
- ¿Qué objetivos esperáis conseguir?
Seguir viviendo de la agricultura es nuestro gran objetivo. Para ello debemos innovar en sistemas de producción para ser más sostenibles, saber qué necesita nuestro cliente y ofrecerles una amplia gama de hortalizas, cercanos a ellos.
- ¿Animaríais a otros productores a formar parte de él?
Sí, les serviría de gran ayuda.
