Cómo conservarlas sin que se oscurezcan.
Existe un método fácil para evitar el oscurecimiento y deterioro progresivo que sufren las patatas en crudo una vez peladas.
Consiste en sumergir en agua las patatas que queramos guardar. El agua debe estar preferiblemente fría, o bien se pueden guardar dentro de un recipiente en el interior de la nevera.
De este modo la patata dejará de oscurecerse y puede mantener su color blanquecino durante dos días, aunque no hay que olvidar que pierde prácticamente todas sus vitaminas, ya que el oxígeno que contiene el agua también las oxida.