¿Todas las personas con intolerancia a la lactosa pueden tomar yogur?
La mayoría de ellas toleran la poca cantidad de lactosa que contiene, por lo que es especialmente interesante que estas personas introduzcan este alimento como fuente de calcio, junto con quesos curados. Esto es posible, ya que las bacterias que intervienen en la fermentación del yogur poseen enzimas necesarias para digerir la lactosa propia de la leche y, por tanto, el proceso de digestión comienza ya en el propio yogur por lo que la absorción intestinal es mucho más fácil. Además, al ser un producto más viscoso se ralentiza el vaciado gástrico lo que aumenta el tiempo que la poca lactasa intestinal y las bacterias del yogur tienen para actuar sobre la lactosa.
¿Es lo mismo tomar yogur que postres lácteos que no necesitan frío, en caso de intolerancia a la lactosa?
Una de las características beneficiosas del yogur es que contiene enzimas como la lactasa que está contenida en las bacterias propias de dicho producto. Los postres lácteos que no necesitan frío han sido tratados térmicamente, por lo que han desaparecido totalmente las bacterias, y por tanto no ejercen los mismos efectos beneficiosos que el yogur. Sin embargo, se ha comprobado que, aunque estos productos no mejoran los síntomas tampoco los empeoran y ello parece deberse a que el tiempo de tránsito intestinal es mayor con estos productos que con la leche.