Cada primavera, regresa al mar Cantábrico tras crecer en las aguas del Atlántico, completando un viaje que es puro instinto, tradición y naturaleza.
¿Cuándo es la temporada de la anchoa del Cantábrico?
Es entre marzo y junio cuando alcanza su máximo esplendor: rica en grasa, sabrosa y en su tamaño ideal. Así comienza la costera, la temporada de pesca más esperada, que sigue el compás del mar y respeta un legado transmitido de generación en generación.
Así se pesca la anchoa del Cantábrico: un día en el puerto de Getaria
1.Noche en alta mar. Empieza la aventura.
Mientras tú duermes, en la oscuridad del Cantábrico, decenas de barcos zarpan desde puertos como Getaria. Los marineros ya saben que la noche será larga. Van en cuadrilla, en busca de los bancos de anchoa que se acercan a la costa en esta época del año. Hay que esperar a que asome el primer rayo de sol para que aparezca el esperado banco. Entonces, se lanza la red, rodeándolas con la técnica tradicional del cerco, que solo atrapa lo que se quiere: anchoas de tamaño adecuado. Es un arte cuidadoso, respetuoso con el mar y por eso tiene el Sello Azul MSC. Una vez recogidas, los pescadores colocan las capturas en cajas con hielo. Todo lo hacen rápido, pero con mimo. Porque saben que la frescura empieza a contarse desde el minuto uno
2.Amanecer en el puerto. Comienza el movimiento.
A las 9 de la mañana, los barcos empiezan a entrar poco a poco en el puerto de Getaria. El ambiente es intenso, pero con un ritmo sereno. En el muelle les espera Jose Antonio Bereciartua, un histórico en EROSKI, que lleva más de 30 años comprando pescado en lonjas del Golfo de Bizkaia. Nada más ver las primeras cajas, ya sabe si la jornada va a ir bien. Y esta parece que promete. Mientras la tripulación descarga los bloques de cajas, dos marineros llevan las muestras a la lonja para el control y la subasta. Todo sucede en minutos. Aquí no se pierde el tiempo: cuanto antes esté el pescado en manos del comprador, más fresco llegará a tu mesa.
3. Control de calidad. La selección de las mejores piezas.
En la lonja, las anchoas se pesan, se miden y se clasifican según la normativa bajo la mirada atenta de los auditores y los posibles compradores. Y por si hubiera dudas, el propio MSC hace análisis de ADN aleatorios en el mercado para confirmar que lo que se ofrece, es lo que realmente es y que son anchoas de calidad. Nada se deja al azar. Las mejores, pueden aspirar a ser EROSKI Natur
- ¿Qué tiene de especial la anchoa EROSKI Natur? Solo se pesca en el Cantábrico, aguas frías que aportan mayor firmeza y sabor, con un tamaño mínimo de 13 cm. Además, tiene el sello MSC, que garantiza una pesca responsable con cerco de bajura, una técnica tradicional con un impacto mínimo hacia otras especies y fondos marinos. Es garantía también de que se respetan los tamaños mínimos y la cuota de anchoa, para mantener la especie y proteger el futuro del mar.
4. La subasta. Segundos que valen oro.
Llega el momento de la compra. Las anchoas pasan a una sala monitorizada y comienza la subasta a la baja. Es cuestión de segundos: el precio cae poco a poco hasta que alguien levanta la mano. Junto a Bereciartua se encuentran mayoristas, conserveras, pescaderías… Todos quieren hacerse con las mejores piezas. El precio depende del tamaño, de si es el primer lote en llegar (los más madrugadores se pagan mejor), y de cómo esté el mercado. Después vienen los costes añadidos: IVA, transporte, sueldos, margen… Un proceso transparente
5. Transporte rápido. Frescura intacta.
Desde que Bereciartua compra la anchoa, hay que moverse rápido. Las cajas se cargan en camiones refrigerados, que mantienen el pescado a menos de dos grados y toman dos rutas: directamente a los centros más cercanos a la costa y a las plataformas de distribución para redirigirlas el resto de los establecimientos. El objetivo es que no pierda ni una pizca de frescura antes de llegar a la pescadería.
6. En tu pescadería. Casi como recién pescado.
Gracias a este proceso tan cuidado, cuando llega a tu pescadería EROSKI y ves la anchoa fresca en el mostrador, sabes que no han pasado más que unas pocas horas desde que fue capturada(no más de 24 horas). Y lo mejor: ha llegado hasta ti respetando el mar, cuidando la especie y garantizando una pesca sostenible, con ese Sello Azul de MSC que verás en los productos de pesca sostenible certificada. Una historia que empieza en la oscuridad del mar… y acaba en tu plato.
