Leire Mugerza:
La Presidenta del Consejo Rector EROSKI S. Coop nos habla sobre cómo hacer compatible el hecho de ser mujer y tener un cargo de responsabilidad.
¿Qué puesto desempañas en la actualidad? ¿En qué empresa?
Siempre he estado en puestos de responsabilidad en el ámbito de calidad, sistemas de gestión, u órganos sociales y actualmente trabajo en la cooperativa Lea Artibai, con los proyectos de mejora de eficiencia lean.
Eres una mujer que ocupa un puesto de responsabilidad, ¿Cómo ha sido tu conciliación y equilibrio entre la vida familiar y responsabilidad laboral?
Como para la mayoría de las mujeres, muy complicada. Tengo 3 niños, y cuando han sido muy pequeños, buscar el equilibrio es muy complicado, porque el trabajo te exige tiempo, la familia también y es el recurso más limitado. He tenido momentos diferentes, donde he decidido priorizar uno u otra, y tomar decisiones en el ámbito personal o profesional en consecuencia. Actualmente, he llegado a un punto, donde he podido encontrar el equilibrio personal, más que con el tiempo dedicado a cada uno (que sé que no está equilibrado), pero lo miro desde la tranquilidad de no echar de menos, cuando estoy en una la otra responsabilidad.
Como presidenta del consejo rector de EROSKI, ¿cómo ves el papel de la mujer en la empresa?
En EROSKI el papel de la mujer es fundamental, somos una cooperativa, además donde el 78% de la plantilla son mujeres, ¿cómo no va a serlo? Creo que tendremos que seguir trabajando para llegar a una conciliación real (como ocurre en la sociedad) pero más en la concienciación cultural, en la educación, en cambiar como asumimos las responsabilidades las mujeres…porque creo que cada vez el papel y las funciones de la mujer en la empresa van a ser más importantes y tendremos más presencia, por lo que debemos prepararnos para ello. Ya que será una tarea de todos.
Por el hecho de ser mujer ¿has percibido algún tipo de techo de cristal, algún tipo de limitación?
En este caso yo soy del colectivo de mujeres privilegiadas, es cierto que siempre he trabajo en un entorno cooperativo, y nunca lo he tenido ni percibido, todo lo contrario. Creo que en momentos de mi vida, el ser mujer ha sido un diferencial pero para mejor, por lo que el orgullo es mayor. He tenido la satisfacción, de haber sido elegida como primera mujer presidente de la primera cooperativa que trabajé, por un colectivo mayoritariamente mujer. Lo mismo creo en EROSKI, creo que para la función que he sido elegida, la opción de ser mujer tiene un significado pero positivo, y esta sensación y sensibilidad me gustaría que fuese también trasladando a la sociedad y empresas.